
De la disolución de la Unión Soviética a la Rusia de Putin
Como se dice en las redes sociales, “era una broma pero quedó”: hacia mediados de los años 80 Mijaíl Gorbachov abrió la puerta a una sucesión de reformas destinada a solidificar la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas de cara a los desafíos de fin de siglo, pero que terminó por desbaratarla, llevándola a la implosión definitiva, la caída de finales de 1991. A treinta años del aquel suceso fuera de serie, Martín Baña ofrece una lectura aguda, sensible y extraordinariamente informada del complejo y contradictorio proceso que determinó el fin de la URSS y del comunismo tal como fue conocido durante décadas, pero también del derrotero político que colocó a Vladimir Putin como el núcleo de poder en la Federación Rusa.