En una parada de guaguas, un día soleado, un joven apesumbrado detiene su 4x4, un viejo enfermo, sin oficio ni beneficio se sube. Este encuentro fortuito les cambiará el destino. Un maestro, en sus últimos años, descubrirá la paz que añorada y la futilidad del rencor; un estudiante, pleno de vida y resentimiento, ignorará los consejos del maestro, pero aprenderá toda su sabiduría para ajustar cuentas y vindicar la memoria. Mientras, en una ciudad cualquiera, a principios de los 2000, algunos habitantes tendrán una despedida explosiva, con las técnicas de un ¿fantasma o un copycat? Al Griego, investigador federal con muchos años de experiencia, lo asignan a averiguar el autor o autora de estas extrañas y aparentemente inconexas muertes. ¿Será obra de Carlos Sagardía?, experto en explosivos, convicto y muerto hace años. ¿Tenía hijos a quien pudo enseñarle la técnica? O ¿Habrá alguien haciéndose pasar por él? ¿Será acaso que no murió?, entonces ¿a quién se enterró? ¿Qué relación tenía Sagardía con los asesinatos? Y sobre todo ¿qué marca del destino une a estos habitantes que terminan entre llamas? Estas preguntan llevan al Griego a descubrir una fisura en el sistema, a la vez que se le agotan los recursos y la desesperación a cometer errores que alertaran a su presa. ¿Le dará caza? ¿Descubrirá la relación entre Sagardía y los muertos o perderá su fama en medio de la burla de su siempre escurridiza presa?