
Durante las décadas de 1960 y 1970, algunos sectores importantes del catolicismo defendieron un trabajo pastoral de liberación en medio de las condiciones políticas que trajo consigo el período de la Guerra Fría. Estos sectores, estudiados ampliamente en el libro, defendieron un discurso puertorriqueñista y a favor de las luchas sociales, sindicales, culturales y estudiantiles durante los años 1960 y 1970. Además, estos sectores católicos defendieron una nueva Iglesia, más democrática y más cercana a los pobres.