A la muerte de su padre seis hermanas irán en busca de su origen y lo que descubran les hará comprender que su amor estaba escrito en las estrellas.
Maia D'Apliese y sus hermanas regresan a la impresionante mansión familiar donde crecieron al descubrir que su adorado padre, que las adoptó en distintos lugares cuando no eran más que bebés, acaba de fallecer. Cada una recibe un sobre que contiene una prometedora pista sobre su origen. A Maia, la mayor de las hermanas y nuestra protagonista, la suya le lleva a una casa en ruinas en Río de Janeiro. Allí comenzará a recomponer las piezas de su historia.
Ochenta años antes, en la Belle Époque de Río de Janeiro, el padre de Izabela Bonifacio aspira a que su hija se case con un aristócrata. Por su lado, el arquitecto Heitor da Silva Costa trabaja en la concepción de una inmensa estatua que se llamará el Cristo Redentor, y su búsqueda del escultor idóneo para llevar a cabo tan ambiciosa obra lo conduce hasta París. Apasionada y deseosa de conocer mundo, Izabela convence a su padre para que la deje acompañarlo a París antes de casarse. Allí, entre el estudio de Paul Landowski y los bulliciosos cafés de Montparnasse, Izabela conocerá al ambicioso y joven escultor Laurent Brouilly, y sabrá desde el primer instante que su vida ha cambiado para siempre.
Maia D'Apliese y sus hermanas regresan a la impresionante mansión familiar donde crecieron al descubrir que su adorado padre, que las adoptó en distintos lugares cuando no eran más que bebés, acaba de fallecer. Cada una recibe un sobre que contiene una prometedora pista sobre su origen. A Maia, la mayor de las hermanas y nuestra protagonista, la suya le lleva a una casa en ruinas en Río de Janeiro. Allí comenzará a recomponer las piezas de su historia.
Ochenta años antes, en la Belle Époque de Río de Janeiro, el padre de Izabela Bonifacio aspira a que su hija se case con un aristócrata. Por su lado, el arquitecto Heitor da Silva Costa trabaja en la concepción de una inmensa estatua que se llamará el Cristo Redentor, y su búsqueda del escultor idóneo para llevar a cabo tan ambiciosa obra lo conduce hasta París. Apasionada y deseosa de conocer mundo, Izabela convence a su padre para que la deje acompañarlo a París antes de casarse. Allí, entre el estudio de Paul Landowski y los bulliciosos cafés de Montparnasse, Izabela conocerá al ambicioso y joven escultor Laurent Brouilly, y sabrá desde el primer instante que su vida ha cambiado para siempre.