"En La troupe Samsonite hay un deseo sostenido de transitar por espacios de representación no muy frecuentados en nuestra narrativa: los márgenes o los terrenos baldíos de las urbanizaciones, los espacios rurales y los pueblos del oeste. Frente a la casa o la ciudad moderna que privilegió la literatura de la segunda mitad del siglo XX en Puerto Rico, en algunos casos para convertirlas en alegorías nacionales, La troupe Samsonite, desde la clave que nos brinda el autor en la solapa del libro, se desplaza por los espacios de la precariedad contemporánea. Y lo hace conjugando la doble acepción del término “precario”: lo que tiene poca estabilidad y lo que no posee recursos suficientes. Los desplazamientos y las carencias, las mudanzas y la pobreza de los personajes van a alternar de manera continua en esta novela. Sin embargo, lejos de ser una narración documental de corte realista sobre las consecuencias de las desigualdades y la segregación de la sociedad contemporánea, esta novela se convierte en un hermoso homenaje a los artistas del margen que se desempeñan en un circo pobre. Se trata de artistas que bregan a la vez que crean, que resuelven al tiempo que imaginan."
-Juan Gelpí 80grados