La novela narra la transición de una niña de tres años a la adolescencia, que ha sufrido el divorcio de sus padres, abuso por parte de un familiar, mudanzas, vacíos y cambios. La niña tiene algo distinto, es poseedora de una sensibilidad y una inteligencia profundas que la llevan a encerrarse dolorosamente en ella misma. Una noche emerge de las letras de un libro de pastas gruesas un demonio enorme con tacones rojos que la sana a través de las herramientas que sólo entrega el poderío del arte: la literatura, la ópera, la pintura, los rituales de pensamiento, y también la espiritualidad, el contacto con la naturaleza. Su demonio —dador de conocimiento desde el principio de los tiempos— se convierte en su maestro, en su dios, su protector y su ángel. Juntos emprenden un camino que llevará a la niña a cuestionar el funcionamiento del mundo que la rodea, la religión, la muerte, la verdad, la existencia, hasta encontrar su propio poder para llegar a ser una mujer, y una gran artista.