La historia del Equipo Argentino de Antropología Forense que les devolvió la identidad a miles de víctimas. Cuando en 1983 Abuelas de Plaza de Mayo pidió ayuda a una ONG estadounidense para identificar cadáveres de los desaparecidos bajo la dictadura militar, no sabía que enviarían a un tejano jubilado, de botas y bigotes, que había identificado a John F. Kennedy y a Tutankamón. Clyde Snow pidió colaboración a los forenses argentinos para el trabajo de campo, pero solo accedieron algunos estudiantes de antropología que luego aprendieron de él y años después fundaron el Equipo Argentino de Antropología Forense. El EAAF se convirtió en la primera organización científica, privada y sin fines de lucro que aplica las ciencias forenses a la investigación y el esclarecimiento de crímenes de masas en la Argentina y en el mundo. Devuelve identidad a las víctimas, aporta evidencias en los tribunales y ayuda a los familiares a recuperar los restos de sus seres queridos. En 35 años, el equipo intervino en 55 países y solo en la Argentina identificó más de 800 desaparecidos, entre ellos, Azucena Villaflor, Che Guevara, Luciano Arruga, Santiago Maldonado, los 43 estudiantes de Iguala y las mujeres de Ciudad Juárez en México, y los soldados de Malvinas, entre tantos otros.
Este libro es todas esas historias juntas. Felipe Celesia narra, con una sensibilidad conmovedora e inusual, el trabajo enorme del equipo que dona lo que gana en premios al grupo, es referencia mundial y, para muchos, el guardián de nuestra memoria.
Este libro es todas esas historias juntas. Felipe Celesia narra, con una sensibilidad conmovedora e inusual, el trabajo enorme del equipo que dona lo que gana en premios al grupo, es referencia mundial y, para muchos, el guardián de nuestra memoria.