Ciudad Juárez es un asentamiento fantasmal enclavado entre el desierto y la frontera. Señales de violencia y desazón se dejan de percibir en sus calles. Carlos, un ingeniero de treinta años, disfruta y sufre al mismo tiempo la soledad que ha construido para sí mismo. Introspectivo, entrenado en la nostalgia, pasa los días perdido en reflexiones. Un tema recurrente es el de las mujeres con quienes ha compartido fugazmente su vida. Belinda, por quien ahora sólo siente un desea vencido. Angélica, que lo abandonó para irse con otro. Blanca, esquiva y contradictoria. Gabriela Torres, su dentista, quien se siente atraída por su afición literaria y su necesidad de cariño. La nueva novela de César Silva Márquez reincide en la construcción de un universo emocional donde los conflictos interiores ordenan realidad y memoria. En su tono, de lírica y bronca melancolía, se deja sentir un oído atento a la fragua de la oralidad, pero también al delicatessen de la poesía, a los pormenores de la narración minimalista, a rastrear las preguntas, los extrañamientos, en una realidad que oculta sus razones y arroja a los personajes por caminos inesperados.