En este breve ensayo, publicado originalmente en 1929, el maestro masón Bernard Shillman expone el sustrato hebraico de la orden, mostrando al lector los pasajes del Tanakh y del Talmud, y las costumbres judías de las que proceden emblemas masónicos como el compás, aspectos ceremoniales como que la iniciación deba realizarse con el pie derecho descalzo o que el nombre de Dios sea considerado inefable.