Un arecibeño regresa a su pueblo con el propósito de avanzar el proyecto de historia oral que para la celebración del quincentenario de La Villa preparan su amigo y él. Antes, sin embargo, se detiene en Río Piedras donde tiene otro asunto pendiente. Sin percatarse él, su ruta se cruza con batallas de jaurías de perros indigentes donde a muerte se juegan exigencias de supervivencia y pasiones de honor.
En estos cuentos novelados se conjugan la historia, la crónica y la memoria a través del lente ambiguo y rico de la literatura. La particularidad de los personajes, así como las inesperadas voces narrativas, nos llevan a (re)plantearnos el amor, la muerte y la identidad más allá de los horizontes esperados.