Todo comenzó cuando, perpleja, leí lo siguiente en el diario primero del joven Hostos: “¿Beneficios de esa proposición? El inmediato, sacarme de Europa, librarme de la lucha con el hambre vergonzante, y llevarme de paso a Puerto Rico, y concederme un mes de olvido y esperanzas, y situarme en mi teatro, en esa América, a cuyo porvenir he consagrado el mío.” (Diario I, 175) Desde esta frase “situarme en mi teatro, en esa América” armaré su propuesta para un teatro antillano. Se estudiarán los textos “¡Sitio! Monólogo de un sediento”, Diario 1866-1869, “La Cuarterona”, Romeo y Julieta, Hamlet, ensayo crítico, “Rossi en Hamlet”, “Un drama de L. A. Baralt”, “De teatro nacional”, “De teatro”, “El 18 del proscripto, monólogo”, “Monólogo (27 de febrero)” y sus piezas dramáticas: “Loa a mamá”, “El cumpleaños”, “¿Quién preside?” y “La llegada de la guagua” (todos pueden leerse en sus respectivas discusiones o como anejos). También entrarán en juego: “La moral y la literatura-la dramática”, Diario II, “El horizonte de Santo Domingo” y “Quisqueya, su sociedad y algunos de sus hijos”, junto a algunas cartas. Son muchos más los materiales que deben revisarse. De hecho, aprovecho para agradecer a los grupos compiladores, sin su monumental trabajo no hubiera sido posible esta investigación ni ninguna otra.