Descubre la fascinante historia de un torero que aunque nació en el Puerto Rico español, se le consideró mejicano. Discípulo del maestro Ojitos, tras recibir la alternativa de Joselito El Gallo estaba destinado a cotas altas, no en vano fue considerado el heredero natural de Gaona hasta que se le cruzó por el camino Bellotero en la plaza de toros de Madrid.
Todo ambientado en una época tan convulsa como apasionante a ambos lados del Atlántico, Ernesto Pastor no fue un personaje al uso. Siempre con el sueño de ser figura del toreo solventará innumerables obstáculos y penalidades hasta codearse con los más importantes matadores de toros en plena Edad de Oro.
Apátrida y desdichado, quedó relegado a la indiferencia y el olvido. Este libro pretende justo lo contrario, rescatar a Ernesto Pastor y junto a él hacer visibles a otros románticos de la fiesta brava.