Este libro de microliteratura resplandece con matices: Fuster Lavín se reafirma, con fuerza, como la gran escritora puertorriqueña del gótico y de la locura asqueante a la que nos sumerge la condición humana. Es la obra con la que también hace su reivindicación feminista más palpable. Además, un aviso inquietante repitiéndonos sin cesar que, aunque sea tan breve como una mariposa, “[e]l amor es un largo péndulo de posesiones y voces abrazadas a la supervivencia y al miedo”. Este es, sin duda alguna, un grato (re)encuentro con una de nuestras mentes literarias más prolíficas, aterradoras y conmovedoras.
-Pabsi Livmar