En lo alto de las montañas de Orocovis vive un coquí muy especial. No es un coquí cualquiera que canta en la noche y se esconde durante el día. No. Este coquí tiene una maleta azul, una pava puertorriqueña, una enorme curiosidad por el mundo y un corazón lleno de preguntas.
Le llaman Coquí Andariego, porque le encanta explorar, aprender refranes y descubrir la magia escondida en cada rincón de Puerto Rico. Desde playas bioluminiscentes hasta montañas ancestrales, Coquí Andariego recorre la isla recogiendo historias, colores, sabores y, sobre todo, sabiduría popular.