
Tienes que hablar con un colega sobre una situación delicada, pero te preocupa que te grite, te culpe o se cierre. Temes que tus emociones te impidan llegar a una resolución. Pero puedes comunicarte de forma constructiva, no combativa. Cómo mantener una conversación difícil le permitirá:
- Descubrir la causa de la fricción
- Mantener una mentalidad positiva
- Desenredar el problema juntos
- Acordar un camino a seguir