Son muchas las lecciones que se desprenden de estos trabajos de Manuel Almeida en torno a Sócrates y las ideas que este expusiera en los diálogos que sostenía con sus concíudadanos ateníenses. Llama la atención sobre todo la convicción del autor que a dos mil cuatrocientos años de distancia podemos aprender mucho de aquel modo de filosofar. Igualmente es importante el llamado que nos hace desde su evidente familiaridad con la escritura platónica a evaluar críticamente lo que nos hemos acostumbrado a pensar demasiado fácilmente en torno a la democracia y a la política en estos últimos tiempos. Se trata de un libro sobre el pasado que es muy actual.
—RafaeI Aragunde, Catedrático, Escuela de Educación,
Universidad Interamericana de Puerto Rico.
En este libro, escrito con una prosa clara y directa, Almeida nos presenta a Sócrates como un idiota. Su idiotez, en el sentido original de la palabra, consiste en el carácter apolítico de su búsqueda filosófica. Frente a esa búsqueda, Sócrates tiene que enfrentar el ardor de una democracia que busca recuperar su fuerza politica. Un impulso que más de dos mil años luego de la vida y muerte de Sócrates, resulta tan necesario como entonces. A través de estos ensayos, Almeida nos muestra la vitalidad de la Teoría Política como quehacer del pensamiento crítico.
—Alex Betancourt, Catedrático Asociado, Depto. de Ciencia
Política, Universidad de Puerto Rico, Río Piedras.
Como en un thriller cinematográfico Manuel S. Almeida nos presenta un Sócrates humano demasiado humano enfrascado en un juicio humano demasiado humano en una Atenas humana demasiado humana. En la mejor tradición de los courtroom dramas y desde una perspectiva radicalmente crítica, la descripción del juicio a Sócrates que se presenta en este libro no solo lo ameniza (y de cierto modo lo moderniza) sino que lo hace iluminar algo mucho más importante: nuestras "modernas democracias" humanas, demasiado humanas, mostrando sus limitaciones, sus orígenes siniestros y sus falsos presupuestos. Esto es: nos las muestra en plena historicidad. Por fin nos llega un Sócrates de carne y hueso en un texto filosófico escrito y legible para gente de carne y hueso.
—Juan Carlos Quiñones, escritor, autor de Todos los nombres el nombre, Brevíario, Bar Schopenhauer, entre otros.
—RafaeI Aragunde, Catedrático, Escuela de Educación,
Universidad Interamericana de Puerto Rico.
En este libro, escrito con una prosa clara y directa, Almeida nos presenta a Sócrates como un idiota. Su idiotez, en el sentido original de la palabra, consiste en el carácter apolítico de su búsqueda filosófica. Frente a esa búsqueda, Sócrates tiene que enfrentar el ardor de una democracia que busca recuperar su fuerza politica. Un impulso que más de dos mil años luego de la vida y muerte de Sócrates, resulta tan necesario como entonces. A través de estos ensayos, Almeida nos muestra la vitalidad de la Teoría Política como quehacer del pensamiento crítico.
—Alex Betancourt, Catedrático Asociado, Depto. de Ciencia
Política, Universidad de Puerto Rico, Río Piedras.
Como en un thriller cinematográfico Manuel S. Almeida nos presenta un Sócrates humano demasiado humano enfrascado en un juicio humano demasiado humano en una Atenas humana demasiado humana. En la mejor tradición de los courtroom dramas y desde una perspectiva radicalmente crítica, la descripción del juicio a Sócrates que se presenta en este libro no solo lo ameniza (y de cierto modo lo moderniza) sino que lo hace iluminar algo mucho más importante: nuestras "modernas democracias" humanas, demasiado humanas, mostrando sus limitaciones, sus orígenes siniestros y sus falsos presupuestos. Esto es: nos las muestra en plena historicidad. Por fin nos llega un Sócrates de carne y hueso en un texto filosófico escrito y legible para gente de carne y hueso.
—Juan Carlos Quiñones, escritor, autor de Todos los nombres el nombre, Brevíario, Bar Schopenhauer, entre otros.